domingo, 30 de junio de 2019
domingo, 9 de junio de 2019
domingo, 2 de junio de 2019
El
Sistema Independency se encuentra un poco apartado del centro geográfico de la
Federación y para la opinión pública está envuelto de un misterioso velo de
secretismo. Está a casi seis años luz de la capital “Babilonia” y apenas unas
cuantas líneas comerciales se dirigen hasta él. A pesar de ello, hoy en día es
sin duda el sistema planetario con mejores fuentes de recursos naturales y el
que posee un tejido industrial más desarrollado. Hace apenas un par de siglos
nadie lo hubiera imaginado. En plena era de la expansión colonizadora nadie
quería ir allí. Se trataba del sistema más hostil y el que tenía una peor
habitabilidad. Solo una expedición de colonos formada por pobres refugiados y
neohumanos sin especializar se atrevió a dar el paso y fundar la primera
colonia en el planeta Aridania. Después de muchos años de malvivir se dieron
cuenta de que estaban viviendo sobre el mayor yacimiento de uranio de la
Federación. La industria de combustibles para motores de astronaves había
nacido y el resto ya es historia.
Todo
el sistema gira en torno a la estrella Independency. Se trata de una potente
estrella de color anaranjado de la corriente principal, una vez y media mayor
que el Sol, que emite una luz cegadora, un calor abrasador y una fuerte
radiación gamma. Se han propuesto diversas teorías que expliquen su inusual
potencia pero, hoy por hoy, ninguna parece satisfactoria.
El
planeta que orbita más cerca de ella es LA CALDERA. Apenas un peñasco calcinado
totalmente inhabitable. Presenta la curiosa característica de que carece de
corteza y que, por tanto, la parte que podemos ver de él es su núcleo de hierro,
titanio y níquel fundidos. Varias veces se ha intentado aprovechar esos
yacimientos tan accesibles de metal pero todas las extractoras automatizadas
que se enviaron sucumbieron derretidas.
El
siguiente planeta, ya en la zona habitable (es un decir), es TRITÓN-5. Un
planeta rocoso de tamaño mediano sin vida autóctona conocida. Al principio se
denominó EL HERMANO ROJO por la característica coloración de su superficie pero
años más tarde, cuando se puso en marcha el plan para crear reservas hídricas
en cada sistema planetario, fueron llevados hasta él grandes cometas de hielo
de agua que formaron lagos y propiciaron el cambio de nombre. Como el agua
tiende a evaporarse más rápido que se consume, el aporte de cometas tiene que
continuar cada cierto tiempo.
Después
viene el planeta principal del sistema, ARIDANIA, donde se encuentra la
capital, RESECURA. Es un planeta rocoso, grande y seco, muy seco. El imparable
desarrollo industrial y económico ha permitido que se creen inmensas
plantaciones subterráneas de Xenohongos, Pseudohelechos y otras especies
vegetales desérticas que, con las adecuadas modificaciones genéticas, se han
adaptado perfectamente a tan rara forma de cultivo y alimentan a la creciente
población del planeta.
La
zona habitable del sistema acaba abruptamente en un denso cinturón de
asteroides. Debe de haber millones de rocas de todas formas y tamaños
transitando en tan nutrido cinturón. Todavía no se han explorado todos los
asteroides que lo forman pero se han encontrado algunos ricos en materiales que
ya están siendo explotados por la lucrativa industria minera aridana. Para
sorpresa de la comunidad científica, en uno de estos peñascos, llamado EL NIDO,
se descubrió una incipiente vida bacteriana de origen autóctono.
Orbitando
alrededor del cinturón de asteroides se encuentra el gigante gaseoso KAOS. A
pesar de su nombre, este planeta se encarga de poner un poco de orden en el
marasmo de asteroides, haciendo que sus trayectorias entren en resonancia
orbital con su fuerte campo gravitatorio. En torno a él gira un conjunto de 14
satélites menores sin ninguna importancia.
R.MACHUCA-19
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